La situación de la vivienda protegida en Valencia se encuentra en un estado crítico, con cifras que reflejan una caída alarmante en la venta de este tipo de inmuebles. En el primer trimestre de 2025, solo se vendieron 134 pisos de vivienda de protección oficial (VPO) en la Comunitat Valenciana, lo que representa apenas el 0,49 % de las 27.479 transacciones inmobiliarias realizadas en la región. Este dato contrasta drásticamente con el objetivo de la Administración, que busca que las VPO representen más del 30 % del total de las compraventas. La tendencia se ha mantenido en un contexto donde la vivienda de segunda mano sigue dominando el mercado, alcanzando un 81,5 % de las transacciones, mientras que la obra nueva ha crecido hasta un 18,5 %, de los cuales solo un 0,49 % corresponde a viviendas protegidas.
La Generalitat Valenciana, consciente de la problemática, decidió aumentar el precio máximo del módulo por el que se pueden vender las VPO a 2.400 euros por metro cuadrado, un incremento significativo respecto a los 1.819 euros anteriores. Sin embargo, los promotores han señalado que este tope se ha quedado desfasado, especialmente en ciudades como Valencia, donde los precios de la vivienda han aumentado considerablemente. Vicente Díez, portavoz del Colegio de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria (API) de Valencia, ha calificado la oferta actual de vivienda asequible como «inadmisible», subrayando la necesidad de un acceso razonable a la vivienda para la población.
### Aumento de Precios en el Mercado Inmobiliario
La falta de oferta de VPO se produce en un contexto donde el precio de la vivienda en la Comunitat Valenciana ha alcanzado niveles récord. Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el precio de los pisos ha experimentado un incremento interanual del 12,3 % en el primer trimestre de 2025, siendo el aumento más significativo en los últimos 18 años. Este encarecimiento es aún más pronunciado en el mercado de la vivienda de segunda mano, que ha visto un aumento del 12,8 %. La escalada de precios se ha intensificado en paralelo a la disminución de los tipos de interés, lo que ha contribuido a un recalentamiento del mercado inmobiliario.
Los datos del INE indican que las viviendas de obra nueva han subido un 9,7 % en la Comunitat Valenciana, mientras que las de segunda mano han registrado un aumento cercano al 13 %. Estos incrementos son comparables a los que se observaban durante la burbuja inmobiliaria de mediados de la década de 2000. Para encontrar cifras similares, es necesario retroceder hasta el segundo trimestre de 2007, justo antes del estallido de la burbuja, cuando los precios de la vivienda aumentaron un 13,9 %.
La situación actual plantea un desafío significativo para los potenciales compradores, especialmente aquellos que buscan viviendas asequibles. La combinación de una oferta limitada de VPO y un aumento desmedido de los precios de la vivienda ha creado un entorno donde muchas personas se ven excluidas del mercado. La presión sobre los precios ha llevado a un ciclo en el que los incrementos continúan, afectando la capacidad de los ciudadanos para acceder a una vivienda digna.
### Desafíos para el Futuro de la Vivienda Protegida
La crisis de la vivienda protegida en Valencia no solo es un problema de oferta y demanda, sino que también refleja una serie de desafíos estructurales en el mercado inmobiliario. La falta de incentivos para los promotores ha llevado a una disminución en la construcción de VPO, lo que a su vez ha contribuido a la escasez de opciones asequibles para los compradores. A pesar de los esfuerzos de la Generalitat para ajustar los precios máximos de las VPO, la realidad del mercado sugiere que se requieren medidas más efectivas para estimular la construcción de vivienda protegida.
Los expertos advierten que, si no se toman medidas urgentes, la situación podría empeorar. La creciente presión sobre los precios de la vivienda podría llevar a un aumento en la desigualdad social, ya que las familias de bajos ingresos se ven cada vez más excluidas del acceso a la vivienda. La protección de la vivienda es esencial para garantizar que todos los ciudadanos tengan la oportunidad de acceder a un hogar a precios razonables.
En este contexto, es fundamental que las autoridades y los promotores trabajen juntos para encontrar soluciones que fomenten la construcción de viviendas protegidas y que se ajusten a las necesidades del mercado actual. Solo a través de un enfoque colaborativo se podrá revertir la tendencia actual y asegurar un futuro más accesible para la vivienda en Valencia.