La reciente absolución de Mónica Oltra, ex vicepresidenta del Consell y ex consejera de Igualdad y Política Inclusivas, ha reavivado el interés por su posible regreso a la política. Oltra dimitió en 2022 tras ser imputada por un presunto delito de encubrimiento relacionado con los abusos sexuales cometidos por su exmarido contra una menor tutelada. Sin embargo, la justicia ha decidido no abrir juicio oral en su contra, lo que ha llevado a Compromís a solicitar su retorno como candidata a la alcaldía de Valencia en las elecciones autonómicas y municipales de 2027. Este movimiento no solo representa una reivindicación personal para Oltra, sino también un intento de la formación nacionalista por recuperar el terreno perdido en el electorado progresista.
La figura de Mónica Oltra ha sido un activo político importante para la izquierda nacionalista valenciana, que sufrió una derrota significativa en las últimas elecciones. La absolución de Oltra ha generado reacciones encontradas, especialmente entre los dirigentes de Compromís, quienes han cuestionado la falta de disculpas públicas por parte de la derecha, a la que acusan de haber llevado a cabo una persecución política y mediática. Sin embargo, este posicionamiento ha reabierto un debate sobre la coherencia en la gestión de los tiempos judiciales en política, recordando que en el pasado, figuras como Francisco Camps no recibieron el mismo escrutinio tras ser absueltos de cargos.
La posible candidatura de Oltra plantea un nuevo escenario en la política valenciana. Su regreso podría movilizar a una parte del electorado que se siente desilusionado con la actual situación política, pero también podría reactivar viejos debates que polarizan la opinión pública. Desde Compromís, se busca capitalizar su absolución y su carisma, pero el contexto sociopolítico ha cambiado desde su salida del gobierno. Las encuestas recientes indican un electorado más fragmentado y un giro hacia el centro-derecha, donde partidos como el PP y Vox han consolidado su presencia.
### La Polarización del Debate Político
La figura de Mónica Oltra no solo es relevante para su partido, sino que también se ha convertido en un símbolo de las tensiones políticas en la Comunidad Valenciana. La derecha ha comenzado a utilizar su nombre para criticar las supuestas malas prácticas del anterior gobierno del Botànic, lo que anticipa una campaña electoral altamente polarizada. Este uso estratégico de su figura podría tener un impacto significativo en la percepción pública, dependiendo de cómo Oltra y su partido manejen la narrativa en torno a su regreso.
La polarización en el debate político no es un fenómeno nuevo, pero la situación actual presenta un desafío particular para Compromís. La formación ha perdido parte de su apoyo electoral y enfrenta la competencia de otros partidos progresistas, como Sumar y sectores municipalistas, que han reaccionado con cautela ante la posible candidatura de Oltra. La preocupación radica en que su figura podría tanto movilizar a los votantes como dividir el electorado progresista, lo que complicaría aún más la estrategia electoral de Compromís.
Además, el contexto en el que se desarrollarán las elecciones de 2027 es crucial. La ciudadanía se ha vuelto más escéptica y exigente, lo que significa que Oltra deberá demostrar su capacidad para reconectar con un electorado que ha cambiado en los últimos años. La eficacia de su regreso dependerá de su habilidad para convertir su absolución en una rehabilitación política efectiva, lo que no será una tarea sencilla en un entorno tan polarizado.
### Estrategias de Reposicionamiento para Compromís
El regreso de Mónica Oltra podría ser visto como una oportunidad para que Compromís recupere su narrativa de liderazgo fuerte y combativo, algo que ha perdido desde su salida del gobierno autonómico. La exvicepresidenta representa una figura carismática que podría ayudar a reconstruir la identidad política del partido y fomentar la cohesión interna. Sin embargo, el camino hacia su posible candidatura está lleno de riesgos y desafíos.
La estrategia de Compromís deberá ser cuidadosamente diseñada para evitar que la figura de Oltra se convierta en un punto de fractura dentro de la izquierda valenciana. La polarización de la opinión pública en torno a su persona podría complicar la tarea de movilizar a los votantes, especialmente si se reactivan debates sobre su pasado y su gestión al frente de la Conselleria de Igualdad. La clave estará en cómo se gestione su narrativa pública y en el equilibrio interno del partido.
En resumen, el regreso de Mónica Oltra a la política valenciana no solo marca un hito en su carrera personal, sino que también plantea importantes interrogantes sobre el futuro de Compromís y la dinámica política en la Comunidad Valenciana. A medida que se acercan las elecciones de 2027, será fundamental observar cómo se desarrollan los acontecimientos y cómo la figura de Oltra puede influir en el panorama político regional.