Las recientes lluvias torrenciales que han azotado la Comunidad Valenciana han tenido un impacto significativo en la agenda de los alcaldes de la región. Este domingo, muchos de ellos se preparaban para asistir a la recepción con los Reyes Felipe y Letizia en el Palacio Real, con motivo del Día de la Hispanidad. Sin embargo, la situación climática ha obligado a varios regidores a modificar sus planes, algunos incluso a cancelar su asistencia. La Casa Real había extendido una invitación a 78 alcaldes de los municipios afectados por la Dana del 29 de octubre, que dejó un saldo trágico de 229 vidas perdidas. La nueva Dana, conocida como Alice, ha mantenido en vilo a los alcaldes, quienes han tenido que decidir entre asistir a un evento protocolario o atender la emergencia en sus localidades.
La situación ha sido especialmente crítica en localidades como Cullera, donde el alcalde, Jordi Mayor, anunció que no podría asistir a la recepción debido a las alertas meteorológicas. Cullera se encuentra bajo un nivel de alerta naranja, lo que ha llevado a Mayor a priorizar la seguridad de sus ciudadanos. Por su parte, el alcalde de Chiva, Ernesto Navarro, también declinó la invitación, citando las alertas de lluvias y un evento local en su municipio. La alcaldesa de Valencia, Mª José Catalá, quien no estaba invitada en su calidad de alcaldesa de la Dana, también se ausentó por motivos familiares, lo que refleja la complejidad de la situación.
A pesar de las ausencias, varios alcaldes de l’Horta Sud lograron asistir a la recepción. Entre ellos, el alcalde de Paiporta, Vicent Ciscar, y la alcaldesa de Torrent, Amparo Folgado, quien expresó su agradecimiento a los Reyes por la invitación. Folgado destacó la importancia de la presencia de los regidores en el evento, no solo como un gesto de reconocimiento, sino también como una oportunidad para visibilizar las necesidades de los municipios afectados por la Dana. Para muchos de estos alcaldes, la recepción es una plataforma para solicitar más apoyo y recursos para la reconstrucción de sus comunidades.
La situación en Valencia sigue siendo tensa, con Bomberos y Protección Civil en alerta máxima. Los alcaldes que asistieron a la recepción están en constante comunicación con sus equipos de emergencia, monitoreando la evolución de la situación climática. La alcaldesa de Catarroja, Lorena Silvent, quien llegó a Madrid tras un viaje apurado, comentó que la invitación de la Casa Real es un reconocimiento al trabajo realizado por las administraciones locales y una oportunidad para pedir ayuda. La incertidumbre sobre la evolución de las alertas meteorológicas ha llevado a muchos a cuestionar la unidad y la coordinación entre las distintas administraciones en momentos de crisis.
Los alcaldes que asistieron a la recepción ven en este evento una oportunidad para llamar la atención sobre las necesidades de sus municipios. La reconstrucción tras la Dana del 29 de octubre ha sido un proceso lento y complicado, y muchos de los regidores presentes en el Palacio Real están decididos a utilizar esta plataforma para abogar por más inversiones e infraestructuras necesarias para sus localidades. La situación actual ha puesto de manifiesto la importancia de la colaboración entre las distintas administraciones y la necesidad de una respuesta coordinada ante emergencias climáticas.
La recepción en el Palacio Real no solo es un evento protocolario, sino que se ha convertido en un espacio donde los alcaldes pueden expresar sus preocupaciones y necesidades. La invitación de la Casa Real es vista como un gesto positivo, que permite a los regidores trasladar la realidad de sus municipios y la urgencia de recibir apoyo. La situación en Valencia, marcada por las lluvias torrenciales y las alertas meteorológicas, ha puesto de relieve la vulnerabilidad de muchas comunidades y la necesidad de una respuesta efectiva y rápida ante desastres naturales.
Los alcaldes que han decidido asistir a la recepción están conscientes de que su presencia es crucial para visibilizar la situación de sus municipios. La recepción con los Reyes es una oportunidad para que los regidores hablen sobre la necesidad de más recursos y apoyo para la reconstrucción. La situación en Valencia sigue siendo incierta, y muchos alcaldes están comprometidos a seguir trabajando en la recuperación de sus comunidades, a pesar de los desafíos que enfrentan. La colaboración entre las distintas administraciones es fundamental para garantizar que las comunidades afectadas no queden solas en su proceso de recuperación.