La empresa Levantina Ingeniería y Construcción SL, ubicada en Alberic y en la Plaza del Patriarca de València, ha sido objeto de atención debido a su vinculación con el exministro de Transportes, José Luis Ábalos. Según un informe de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, la firma logró contratos que suman un total de 94 millones de euros, en su mayoría a través de uniones temporales de empresas (UTE) con otras grandes constructoras. Esta situación ha suscitado una serie de investigaciones que apuntan a posibles irregularidades en la adjudicación de estos contratos.
La UCO ha elaborado un listado de adjudicaciones investigadas que están relacionadas con Levantina, lo que ha llevado a las autoridades a examinar más de cerca las relaciones entre la empresa y los principales implicados en el caso, incluyendo a Koldo García, asesor de Ábalos, y el empresario Víctor de Aldama. Se ha señalado que Levantina se ha convertido en un elemento común entre los investigados, manteniendo reuniones con ellos y compartiendo información sobre los resultados de estas interacciones.
Uno de los aspectos más intrigantes de esta investigación es la forma en que Koldo García y Levantina han intentado ocultar sus comunicaciones. Según el informe, ambos utilizaron líneas telefónicas desechables y nombres en clave para referirse a personas y lugares, lo que sugiere un intento deliberado de dificultar la identificación de los implicados en la presunta consecución fraudulenta de contratos públicos. Este tipo de tácticas ha llevado a la Guardia Civil a considerar que existe un patrón de comportamiento que podría implicar corrupción en la adjudicación de contratos.
### La Relación entre Koldo García y José Ruz
La conexión entre Koldo García y el empresario José Ruz se remonta a un correo electrónico enviado por Ruz el 19 de marzo de 2019, en el que expresaba su interés en reunirse con García. Este encuentro se llevó a cabo el 27 de marzo de 2019 en el Ministerio de Fomento, lo que marcó el inicio de una relación laboral que, según el informe, fue muy fructífera. Desde el principio, Ruz mostró disposición para ayudar a García en cualquier necesidad que este le planteara.
La comunicación entre ambos se intensificó, y a partir de principios de 2021, comenzaron a utilizar líneas telefónicas desechables para mantener sus conversaciones. Utilizaban términos como «café» o «cafetera» para referirse a sus contactos, lo que indica un esfuerzo consciente por mantener en secreto la naturaleza de sus interacciones. Esta estrategia de ocultamiento se volvió más evidente cuando se reveló que Ruz había pagado a García y a Ábalos una «pensión» de 2.600 euros mensuales a través de una empresa interpuesta, incluso después de que ambos habían dejado sus cargos en el Ministerio de Transportes.
Entre los contratos que Levantina ha gestionado se encuentran obras significativas, como la duplicación de una carretera entre Dos Hermanas y Los Palacios, la construcción de una estación del AVE en Elx y una obra de 72 millones en la autovía A-12 del Camino de Santiago. Estos contratos, en su mayoría adjudicados en UTE con otras constructoras, han sido objeto de escrutinio debido a las circunstancias que rodean su concesión.
### Implicaciones de la Investigación
La investigación sobre Levantina y su relación con el exministro Ábalos ha puesto de relieve la necesidad de una mayor transparencia en la adjudicación de contratos públicos en España. La UCO ha señalado que el uso de líneas telefónicas desechables y nombres en clave para ocultar las comunicaciones entre los implicados es un indicativo de que podría haber habido un intento de manipular el proceso de adjudicación en beneficio de Levantina y otras empresas constructoras.
La situación ha generado un debate sobre la corrupción en el sector público y la necesidad de implementar medidas más estrictas para prevenir la manipulación de contratos. La Guardia Civil continúa su investigación, y se espera que surjan más detalles a medida que se profundice en el caso. La conexión entre Levantina, Koldo García y José Luis Ábalos es solo una parte de un rompecabezas más grande que podría tener repercusiones significativas en la política y la administración pública en España.
La atención mediática y pública sobre este caso subraya la importancia de la vigilancia y la rendición de cuentas en la gestión de recursos públicos. A medida que se desarrollan los acontecimientos, será crucial observar cómo se manejan las investigaciones y qué medidas se tomarán para abordar las preocupaciones sobre la corrupción en el ámbito de la construcción y la adjudicación de contratos en el país.