La Audiencia Provincial de Castellón se prepara para un juicio que ha captado la atención de la sociedad local. Este martes, 17 de junio, se juzgará un caso de abuso sexual que involucra a un hombre de 96 años y a un menor de 15. Los hechos, que ocurrieron el 18 de noviembre de 2021, han generado un gran revuelo y preocupación en la comunidad, resaltando la importancia de la protección de los menores y la severidad de los delitos sexuales.
### Detalles del Caso
Según el escrito de acusación de la Fiscalía Provincial, el menor se encontraba en un parque esperando para ir a la casa de su profesor de repaso cuando el acusado se le acercó. En un primer momento, el hombre, originario de Cuenca, se presentó y comenzó una conversación aparentemente inocente. Sin embargo, la situación se tornó inquietante cuando el acusado hizo comentarios inapropiados, sugiriendo que “le haría una chupadita”, lo que provocó un evidente malestar en el joven. Este primer encuentro dejó al menor con una sensación de incomodidad que se intensificó con un segundo acercamiento del mismo individuo cinco días después.
En esta ocasión, el hombre se encontraba en el portal del domicilio del profesor y reconoció al menor. Con un comportamiento libidinoso, lo abrazó y le dio un beso en la mejilla, al mismo tiempo que le hacía comentarios sugestivos sobre “darse unos revolcones” y tocándole sus partes íntimas. Afortunadamente, el menor logró escapar y entrar en el edificio, pero el acusado lo siguió, lo que intensificó la angustia del joven. Finalmente, el menor pudo refugiarse en la casa de su profesor, donde se sintió a salvo.
### Proceso Judicial y Consecuencias
Ante la gravedad de los hechos, la madre del menor decidió presentar una denuncia. La Fiscalía, tras investigar el caso, ha calificado los actos del acusado como un delito de abuso sexual a un menor de 16 años. En consecuencia, se ha solicitado una pena de cuatro años de prisión, además de una indemnización de 3.000 euros para la víctima por los perjuicios morales sufridos.
El caso no solo se limita a la pena de prisión. La Fiscalía ha propuesto una serie de medidas adicionales que buscan proteger al menor y garantizar que el acusado no pueda acercarse a él. Se ha solicitado una inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo durante el tiempo de la condena, así como la prohibición de acercarse al menor a una distancia de 500 metros durante seis años. Además, se ha propuesto una medida de libertad vigilada que se aplicaría tras el cumplimiento de la pena de prisión.
Este caso ha suscitado un amplio debate en la sociedad sobre la protección de los menores y la necesidad de un sistema judicial que actúe con firmeza ante delitos de esta naturaleza. La combinación de la edad del acusado y la vulnerabilidad de la víctima ha generado una discusión sobre cómo se manejan estos casos en el sistema judicial español.
La comunidad de Castellón está a la expectativa de cómo se desarrollará el juicio y qué decisiones tomará la Audiencia Provincial. La importancia de este caso radica no solo en la justicia para el menor, sino también en el mensaje que se envía a la sociedad sobre la intolerancia hacia el abuso sexual y la protección de los más vulnerables.
La atención mediática y pública que ha recibido este caso pone de manifiesto la necesidad de abordar el tema del abuso sexual de manera más amplia, promoviendo la educación y la sensibilización sobre la protección de los menores. La sociedad debe estar alerta y actuar en conjunto para prevenir situaciones de abuso y garantizar que todos los niños y adolescentes puedan crecer en un entorno seguro y protegido.
El juicio del 17 de junio será un momento crucial no solo para el menor y su familia, sino también para la comunidad en general. La resolución de este caso podría sentar un precedente importante en la lucha contra el abuso sexual y la protección de los derechos de los menores en España.