La reciente decisión del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) ha marcado un hito en el ámbito educativo de la región. La Conselleria de Educación ha logrado una victoria judicial significativa al desestimar el recurso presentado por el sindicato UGT, lo que reafirma la legalidad de la consulta sobre la lengua base en las aulas. Este proceso, que permite a las familias elegir entre el valenciano y el castellano como lengua de instrucción, ha suscitado un intenso debate en la sociedad valenciana y ha puesto de relieve la importancia de la autonomía educativa y la cooficialidad lingüística.
La consulta, que se llevó a cabo entre el 25 de febrero y el 4 de marzo de 2025, tuvo una participación notable, con 339.411 familias votando, lo que representa un 58% del total de convocados. Este alto nivel de participación indica un fuerte interés y compromiso de la comunidad en la configuración del modelo educativo de sus hijos. Los resultados mostraron una preferencia por el valenciano, que obtuvo el 50,5% de los votos, aunque las provincias de Castellón y Valencia mostraron una inclinación significativa hacia el valenciano, mientras que Alicante se decantó mayoritariamente por el castellano.
La Ley de Libertad Educativa, que establece este nuevo marco, busca garantizar la libertad de elección de los padres en la educación de sus hijos. Ignacio Martínez, director general de Ordenación Educativa y Política Lingüística, celebró la decisión del tribunal, interpretándola como un respaldo a la consulta y a la autonomía de los centros educativos. La sentencia no solo valida el proceso de consulta, sino que también refuerza la idea de que la convivencia de ambas lenguas es posible y beneficiosa para la sociedad valenciana.
### Implicaciones de la Sentencia Judicial
La sentencia del TSJCV no solo tiene implicaciones legales, sino que también refleja un cambio en la percepción social sobre la educación y la lengua. El sindicato UGT había argumentado que la consulta vulneraba la autonomía pedagógica de los centros y afectaba los derechos del profesorado. Sin embargo, el tribunal ha desestimado estas alegaciones, afirmando que la consulta telemática es compatible con el ordenamiento jurídico y las funciones del profesorado. Esta decisión puede ser vista como un avance hacia una mayor flexibilidad en la gestión educativa, permitiendo que las familias tengan voz en la elección del idioma de instrucción.
La participación masiva en la consulta también sugiere que la sociedad valenciana está dispuesta a involucrarse activamente en decisiones que afectan la educación de sus hijos. Este fenómeno puede interpretarse como un signo de madurez social, donde los ciudadanos no solo son receptores de políticas educativas, sino que también son actores activos en su diseño y ejecución. La capacidad de elegir el idioma de instrucción es un aspecto fundamental de la identidad cultural y lingüística, y su reconocimiento en el ámbito educativo es un paso hacia la consolidación de una sociedad más inclusiva.
### La Cooficialidad Lingüística y su Impacto en la Educación
La cooficialidad del valenciano y el castellano en la Comunitat Valenciana plantea desafíos y oportunidades en el ámbito educativo. La ley que regula la consulta de la lengua base busca equilibrar el uso de ambas lenguas en las aulas, promoviendo una educación que respete y fomente la diversidad lingüística. Sin embargo, la implementación de esta ley ha generado tensiones entre diferentes grupos sociales y políticos, que ven en la lengua un símbolo de identidad y pertenencia.
El hecho de que el 99,8% del alumnado esté estudiando en la lengua base elegida por sus familias es un indicador de que, a pesar de las controversias, la mayoría de la población está satisfecha con el sistema actual. Esto sugiere que la coexistencia de ambas lenguas en el ámbito educativo no solo es posible, sino que también puede ser beneficiosa para el desarrollo integral de los estudiantes. La educación bilingüe puede enriquecer la experiencia de aprendizaje, proporcionando a los alumnos habilidades lingüísticas que son cada vez más valoradas en un mundo globalizado.
Sin embargo, es crucial que las políticas educativas se implementen de manera que no se favorezca a una lengua sobre la otra. La formación del profesorado, la disponibilidad de recursos educativos en ambas lenguas y la sensibilización de la comunidad sobre la importancia de la diversidad lingüística son aspectos que deben ser considerados para garantizar el éxito de esta iniciativa. La colaboración entre las instituciones educativas, los sindicatos y las familias será fundamental para construir un sistema educativo que refleje la riqueza cultural de la Comunitat Valenciana.
La reciente victoria judicial de la Conselleria de Educación no solo refuerza la legalidad de la consulta de la lengua base, sino que también abre un espacio para el diálogo y la reflexión sobre el futuro de la educación en la región. La capacidad de las familias para elegir el idioma de instrucción es un derecho que debe ser protegido y promovido, y la participación activa de la sociedad en este proceso es un indicativo de que la educación es un tema que trasciende las aulas y se convierte en un asunto de interés colectivo.
En resumen, la consulta sobre la lengua base en la educación valenciana es un tema que va más allá de la simple elección entre valenciano y castellano. Es un reflejo de la identidad cultural, de la autonomía educativa y de la necesidad de construir un sistema que respete y valore la diversidad. La reciente decisión del TSJCV es un paso hacia adelante en este camino, y su impacto se sentirá en las aulas y en la sociedad valenciana en su conjunto.
