La salud ocular es un aspecto fundamental de nuestro bienestar general, y su cuidado debe ser una prioridad a lo largo de todas las etapas de la vida. Con motivo del Día Mundial de la Visión, que se celebra el 9 de octubre, los especialistas en oftalmología han hecho un llamado a la población sobre la importancia de realizar revisiones periódicas para prevenir problemas visuales. Según datos recientes, se estima que más del 80% de los problemas de visión son evitables o tratables si se detectan a tiempo. Esto subraya la necesidad de estar atentos a nuestra salud ocular y adoptar hábitos que favorezcan una visión óptima.
### La Amenaza de la Fatiga Visual Digital
En la actualidad, el uso excesivo de dispositivos electrónicos ha llevado a un aumento significativo de la fatiga visual digital. Este fenómeno se manifiesta a través de síntomas como sequedad ocular, visión borrosa, dolor de cabeza y cansancio ocular, y es especialmente común entre quienes pasan largas horas frente a pantallas. Los especialistas advierten que esta sobreexposición puede fatigar los músculos oculares y reducir el parpadeo, lo que agrava la situación.
El doctor Manuel Losada, jefe del Servicio de Oftalmología del Hospital Quirónsalud Murcia, explica que la fatiga visual digital es consecuencia de varios factores. Entre ellos se encuentran el uso continuado de pantallas sin realizar pausas adecuadas, la mala iluminación del entorno y las posturas incorrectas al trabajar o estudiar. Además, la falta de lubricación ocular, provocada por la reducción del parpadeo, contribuye a la aparición de molestias visuales.
Para mitigar los efectos de la fatiga visual digital, se recomienda adoptar una serie de hábitos saludables. Uno de los más conocidos es la regla 20-20-20, que consiste en mirar un objeto situado a unos seis metros de distancia durante al menos 20 segundos cada 20 minutos de trabajo visual. También es crucial mantener una distancia adecuada entre los ojos y la pantalla, que debe ser de entre 50 y 60 centímetros, así como ajustar el brillo y el contraste para evitar reflejos que puedan forzar la vista.
Además, los especialistas sugieren parpadear con frecuencia y utilizar lágrimas artificiales en caso de sequedad ocular. Cuidar la iluminación ambiental y mantener una postura correcta durante el uso de dispositivos son otros aspectos clave para proteger la vista. Por último, es fundamental asegurarse de tener un descanso adecuado, ya que la falta de sueño puede incrementar significativamente la fatiga ocular.
### La Importancia de las Revisiones Oculares
La prevención es la clave para mantener una buena salud ocular. Los especialistas enfatizan la importancia de realizar chequeos rutinarios, incluso en ausencia de síntomas. Muchas patologías oculares graves, como el glaucoma, pueden avanzar durante años sin presentar señales evidentes. Por ello, revisar la vista regularmente es la única forma de detectar problemas a tiempo y preservar la visión.
La primera revisión oftalmológica debe realizarse entre los 3 y 4 años, antes del inicio de la etapa escolar, para detectar posibles alteraciones visuales tempranas. En el caso de los niños, se aconseja realizar una revisión antes de los 6 años y otra al comenzar la adolescencia. Los adultos jóvenes, si no presentan síntomas ni antecedentes familiares, deberían someterse a un control visual cada dos o tres años. A partir de los 40 años, cuando aumenta el riesgo de padecer patologías como el glaucoma, las cataratas o la presbicia, se recomienda una revisión cada uno o dos años. Finalmente, los mayores de 60 años deben acudir al oftalmólogo al menos una vez al año.
Los especialistas de Quirónsalud también advierten que es fundamental acudir al oftalmólogo si se presentan síntomas como visión borrosa persistente, aparición de destellos o manchas, pérdida de campo visual, dolor ocular o una mayor sensibilidad a la luz. Estos pueden ser indicios de enfermedades que requieren diagnóstico y tratamiento precoz.
En resumen, la salud ocular es un aspecto crucial que no debe ser descuidado. La prevención a través de revisiones periódicas y la adopción de hábitos saludables son esenciales para mantener una buena visión a lo largo de la vida. La educación sobre la salud ocular y la concienciación sobre los riesgos asociados al uso excesivo de dispositivos electrónicos son pasos importantes para garantizar que la mayoría de los problemas de visión sean evitables. La salud de nuestros ojos es un reflejo de nuestro bienestar general, y cuidarlos adecuadamente es una inversión en nuestra calidad de vida.