La seguridad vial es un tema de vital importancia en la sociedad actual, y uno de los factores más críticos que influye en ella es la salud visual de los conductores. Recientemente, un estudio realizado por el Colegio de Ópticos-Optometristas de la Comunitat Valenciana ha revelado cifras alarmantes sobre la salud visual de los conductores en esta región. Según el Barómetro de la Salud Visual de la población de la Comunitat Valenciana 2025, un preocupante 43,7 % de los más de tres millones de conductores valencianos no se somete a revisiones periódicas de su visión. Esta falta de atención a la salud ocular puede tener consecuencias graves, no solo para los propios conductores, sino también para los demás usuarios de la vía.
### La Relación entre Visión y Seguridad Vial
La visión es uno de los sentidos más importantes al momento de conducir. Se estima que el 90 % de la información que recibe un conductor proviene de sus ojos. Por lo tanto, cualquier deficiencia visual puede afectar la capacidad de tomar decisiones rápidas y precisas al volante. El estudio indica que más de la mitad de los conductores valencianos (54,3 %) reconoce experimentar alguna dificultad visual que podría comprometer su seguridad al conducir. Esta situación es alarmante, ya que se estima que alrededor del 20 % de los accidentes de tráfico están relacionados, de manera directa o indirecta, con problemas de visión.
El presidente del Colegio de Ópticos-Optometristas, Andrés Gené, ha enfatizado la importancia de realizar revisiones visuales periódicas. Con el paso del tiempo, las capacidades visuales tienden a deteriorarse, lo que puede poner en riesgo no solo la vida del conductor, sino también la de los demás. La visión nocturna, por ejemplo, se reduce hasta en un 70 %, y el sentido de la profundidad se vuelve siete veces menos eficaz. Estas condiciones hacen que los accidentes de tráfico nocturnos sean mucho más graves que los diurnos. De hecho, el 42,7 % de los encuestados experimenta molestias visuales por la noche, mientras que solo el 8 % las padecen durante el día.
### Factores de Riesgo en la Conducción
Durante los exámenes visuales, los ópticos-optometristas evalúan cuatro factores de riesgo principales que afectan la conducción: la agudeza visual, la fatiga visual, la visión binocular y el deslumbramiento. Cada uno de estos aspectos es crucial para garantizar una conducción segura. Por ejemplo, una agudeza visual deficiente puede dificultar la identificación de señales de tráfico o la percepción de otros vehículos, lo que aumenta el riesgo de accidentes.
La fatiga visual, que puede ser causada por largas horas frente a pantallas o por la falta de descanso adecuado, también juega un papel importante. Los conductores que experimentan fatiga visual pueden tener dificultades para concentrarse y reaccionar ante situaciones imprevistas en la carretera. La visión binocular, que permite la percepción de profundidad y distancia, es esencial para evaluar correctamente la velocidad de otros vehículos y la distancia entre ellos. Por último, el deslumbramiento, especialmente durante las horas pico de luz solar o al conducir de noche, puede afectar gravemente la capacidad de un conductor para ver claramente.
La COOCV subraya que contar con una correcta compensación óptica, como gafas o lentes de contacto adecuadas, puede potenciar y optimizar las capacidades visuales, contribuyendo así a una conducción más eficaz y segura. Las revisiones periódicas de la visión no solo son fundamentales para asegurar que los conductores se encuentren en óptimas condiciones, sino que también son una responsabilidad social para garantizar la seguridad en las carreteras.
La falta de atención a la salud visual puede tener repercusiones significativas. Por ello, es esencial que los conductores tomen conciencia de la importancia de cuidar su visión y se sometan a revisiones regulares. La salud visual no debe ser un aspecto que se pase por alto, especialmente cuando se trata de la seguridad en la carretera. La prevención y el cuidado de la salud ocular son pasos fundamentales para reducir el número de accidentes y mejorar la calidad de vida de todos los usuarios de la vía.