La aerolínea irlandesa CityJet se encuentra en una situación crítica tras solicitar un proceso de ‘examinership’, un mecanismo legal en Irlanda que permite a las empresas en crisis reestructurarse y buscar viabilidad. Esta decisión se produce después de que CityJet perdiera un contrato clave de alquiler de aviones con tripulación (‘Wet Lease’) con Lufthansa, lo que ha llevado a la aerolínea a una reestructuración interna por segunda vez en cinco años, siendo la primera ocasión durante la pandemia de COVID-19.
### Impacto de la Pérdida del Contrato
CityJet, que desde 2018 no opera vuelos regulares, ha visto cómo la pérdida del contrato con Lufthansa afecta gravemente su flota. Este acuerdo representaba una fuente significativa de ingresos, ya que la aerolínea irlandesa arrendaba seis de sus 21 aviones a la compañía alemana. Con la cancelación del contrato, CityJet se enfrenta a un déficit neto que podría alcanzar los 38,5 millones de euros, según informes de medios irlandeses. Esta situación ha llevado a la compañía a buscar la protección del tribunal irlandés para reestructurar sus operaciones y asegurar su futuro.
A pesar de las dificultades, Air Nostrum, la aerolínea valenciana que se asoció con CityJet en 2023 para formar parte de la alianza SARA (Strategic Alliance of Regional Airlines), ha asegurado que las dos empresas operan de manera independiente. Carlos Bertomeu, el máximo dirigente de Air Nostrum, ha enfatizado que cada compañía es responsable de sus propias obligaciones financieras y que no habrá trasvase de fondos entre ellas. Esto significa que, aunque CityJet esté atravesando una crisis, Air Nostrum no se verá directamente afectada en su funcionamiento diario.
### Mantenimiento y Operaciones de Air Nostrum
A pesar de la crisis de CityJet, Air Nostrum ha continuado realizando el mantenimiento programado de las aeronaves de la aerolínea irlandesa en sus instalaciones de Quart de Poblet. Sin embargo, la pérdida del contrato con Lufthansa podría impactar esta carga de trabajo. Desde Air Nostrum han minimizado este impacto, afirmando que las operaciones de mantenimiento de sus propios aviones son significativamente mayores y que, hasta que se complete el contrato actual, CityJet seguirá operando con normalidad su flota.
Además, la situación de CityJet ha llevado a Air Nostrum a reconsiderar su estrategia en la alianza SARA. A pesar de que en el pasado se mencionó la posibilidad de incorporar nuevas aerolíneas a la alianza, la compañía ha negado que haya planes inmediatos para hacerlo. Esto podría ser un indicativo de que Air Nostrum prefiere centrarse en fortalecer su propia operación antes de expandir su red de alianzas.
La situación de CityJet es un recordatorio de los desafíos que enfrentan muchas aerolíneas en un entorno post-pandemia, donde la recuperación del sector aéreo ha sido desigual y muchas empresas aún luchan por encontrar su camino hacia la estabilidad financiera. La reestructuración de CityJet podría ser un paso necesario para que la aerolínea recupere su viabilidad, pero también plantea preguntas sobre el futuro de su asociación con Air Nostrum y el impacto en la alianza SARA.
En resumen, la crisis de CityJet resalta la fragilidad del sector aéreo y la importancia de la gestión financiera adecuada en tiempos de incertidumbre. Las aerolíneas deben adaptarse rápidamente a las condiciones cambiantes del mercado y encontrar formas innovadoras de operar de manera eficiente y rentable. La situación actual de CityJet y su relación con Air Nostrum será un punto de interés en los próximos meses, a medida que ambas compañías naveguen por este complicado panorama.